El agua suspende el limo
que sedimenta el fondo del río,
de un lago,
del mar.
El limo es el barro
o légamo mezclado con restos orgánicos.
El légamo es un lodo pegajoso de agua de lluvia
o cieno estancado.
Y este
NO lugar
NO tiempo
NO espacio
Es el SEDIMENTO
de nuestras búsquedas en dos años de trabajo a la distancia.
Esto es el resto,
la señal que queda de algo inmaterial que pasa de un estado a otro.
________SEDIMENTO
QUIÉN ES YO
_____________________SOY UN RÍO FUERTE
CARTOGRAFÍA DE UN ENCUENTRO
PROYECTO ESCÉNICO-PERFORMÁTICO A DISTANCIA
Sofía Grimaux - Delfina Oyuela - Eva Palottini
"El hogar siempre nos parece pegado a la tierra, aún cuando sea un barco. O una carreta. Y esa fue mi primera isla, la que me nació mientras viajábamos, un rectángulo de madera y lona que manteníamos oscuro para conservar la frescura y ahuyentar las moscas que parecían salir de la nada misma y reproducirse sin más ayuda que la del aire."
Vuelvo a la casa materna y soy extranjera en mi propia tierra.
Mi mirada revela esa inexplicable extrañeza:
perdí la familiaridad con el propio hogar.
Me reencuentro con mis cosas de otra vida:
Mi cajita de música con su bailarina,
Mi colección de prendedores,
Un peluche de Mickey Mouse,
Innumerables papeles,
Carpetas,
Libros,
Mis fotos
Todo se vuelve una constante oscilación entre lo lejano y lo cercano.
La pregunta es
¿QUIÉN ES YO?
Mis manos tocan las teclas y convierten mi cuerpo en un algoritmo con fuente arial y un tamaño determinado.
Si agrando el tamaño de la letra, ¿significa que estoy creciendo?
Durante una primer instancia de investigación aparece el río como analogía del afluente de datos que viaja a través de millones de metros de fibra óptica para lograr la comunicación, mediada por los dispositivos tecnológicos, entre nosotras tres. Haciendo de nosotras un cuerpo interconectado por y para el trabajo.
Las aventuras de la China Iron
Gabriela Cabezón Cámara
¿Cómo interrogar cuando el yo que interroga ni siquiera está completamente seguro de su existir?
Fui al río
Fui al río...
Fui al río, y lo sentía
cerca de mí, enfrente de mí.
Las ramas tenían voces
que no llegaban hasta mí.
La corriente decía
cosas que no entendía.
Me angustiaba casi.
Quería comprenderlo,
sentir qué decía el cielo vago y pálido en él
con sus primeras sílabas alargadas,
pero no podía.
Regresaba
—¿Era yo el que regresaba?—
en la angustia vaga
de sentirme solo entre las cosas últimas y secretas.
De pronto sentí el río en mí,
corría en mí
con sus orillas trémulas de señas,
con sus hondos reflejos apenas estrellados.
Corría el río en mí con sus ramajes.
Era yo un río en el anochecer,
y suspiraban en mí los árboles,
y el sendero y las hierbas se apagaban en mí.
Me atravesaba un río, me atravesaba un río!

Juan L Ortiz
En la crisis producto del fracaso amoroso me mudé cinco veces de una casa a otra y lo más estable que tuve fue ir a remar al Delta. Cuando todo está inestable, de un modo extraño, los lugares de estabilidad son los que se mueven.
Intentar encontrar a las otras en las palabras, leyéndolas.
No termino de entender qué quiero de esto.
Un cursor sin juicio que vomita desparpajo de palabras sueltas, livianas y pesadas.
Esto es una desconexión total.
Nuestro cuerpo es una escritura impulsiva de tres, a la distancia.
Recordatorio importante: Mp4 es video - Mp3 es audio.
¿La obra somos nosotras tratando de acercarnos?
Son nuestros cuerpos muertos de miedo y deseantes?
Tres videos-poema en tres ríos distintos:
Río de la Plata en San Isidro -Buenos Aires, Río Anisacate en Los Aromos -Córdoba- y Riachuelo en la Boca -Ciudad de Buenos Aires.
“Tenemos que reinventar el placer, la afectividad y el cuerpo erótico en una condición marcada por el horizonte de la extinción” Franco Bifo Berardi
Si lo dejamos se sostiene solo. No es tarea nuestra. Cada algo es una celebración de la nada que lo sostiene. Cuando nos quitamos el mundo de los hombros notamos que no se cae.
¿Dónde está la responsabilidad?
Que quién soy? Que qué hago? Que a dónde estoy? Que dónde voy? Que yo quién fui? Que qué debí? En quién confié? A quién cuidé? Por qué perdí? Soy yo? Soy esto? Quién es el Yo que sostiene supuestamente este cuerpo?
LA AGOTADORA ANTINOMIA
ENTRE YO Y EL MUNDO
Un hombre pasea a su perro, sentado
sobre una piedra deja que se acerque
a la orilla, toma agua y busca un palo.
A partir de este trabajo descubrí que
la abuela de mi abuelo era mulata.
(Nuestra sala de ensayo que es la pantalla.)
En febrero del 2021,
rodeada de montañas catamarqueñas
mientras miraba fijamente a un tunate gigante,
escuché un audio que proponía continuar trabajando juntas.
YO BESÉ MI COMPUTADORA.
El otro día la besé. Sí. Terminando de trabajar espléndidamente juntas,
le agradecí, la acaricié
y la besé.
¿Viste cómo llueve?
Llovió así toda la noche
y a cada cierto tiempo yo te hablaba, estuvieras donde estuvieras,
aunque fuera en el extremo más inalcanzable
de la tierra. Cuando llueve así, toda la noche, te decía
pareciera que el mundo fuera a desprenderse de su eje,
pero la sorpresa más inmensa es que el vendaval termina
y todo permanece como estaba, apenas un poco de desorden
que lentamente se transforma en armonía.
Desde niños, vivimos sobreviviendo a catástrofes como ésa,
a los efectos de lo que tendría que haber pasado y no pasó:
que la casa se inunde y nuestras cosas se pierdan
arrastradas por la marea sucia, entre piedras y palos
y restos de animales, un desperdicio más lo que hasta entonces
ha sido nuestra historia, los objetos
que confirman que somos seres físicos y no un soplo
filtrándose desde afuera de esa vida brutal de la materia
que no se detiene jamás para incluirnos. ¿Soñaste alguna vez,
cuando llega la violencia del aguacero,
con que el río se salga de su cauce para siempre y nos empuje,
soñaste con la noche en que el rayo finalmente nos alcance,
descalzos bajo la luz, como esperando saber algo
que sólo el impacto de una fuerza sobre el cuerpo
podría revelarnos? Pero el rayo no cae, no cayó
y al día siguiente todo sigue a salvo en el mismo lugar.
Ese es el mayor desastre que conozco: haber estado al borde,
una noche, de que nos fuera concedida una verdad
extraordinaria, y al amanecer darnos cuenta
de que somos los mismos y no sabemos nada
que no supiéramos ya.
JOHN CAGE
LUCRECIA MARTEL
Claudia Masin
Kerambi mita
Kambu

Kamby
No tengas miedo
¿Dónde está el animal muerto que pedí?
Les dije que hacía falta algo de materia muerta,
ya sin alma,
un cuerpo dotado de sensibilidad
al que se le acabara de arrebatar la esencia,
porque en el examen de la carne muerta
reside el profundo misterio de la vida.
Los limites, me limitan?
ANGÉLICA LIDELL
Me asumo limitada?
Cada una en el patio de sus nostalgias
Todo amor tiene su paisaje.
En el río Cosquín ¿cuántas gotas hay de Yuspe y cuántas gotas hay del río San Francisco?

El río es una serpiente que tiene la boca en la lluvia y la cola en el mar.
ASÍ NO ME CANSA LA PANTALLA.
EL RÍO EN SÍ MISMO ANCLADO
COMO LA SANGRE,
SIN DESEMBOCADURA NI NACIENTE.
Torrente
cuenca
arroyo
río
afluente
lago
mar chiquita
represa
cauces y
orillas
EN SAN ISIDRO HAY APROXIMADAMENTE


25 parroquias,
11 teatros
70 pizzerias
98 colegios privados
37 escuelas
3 hospitales
5 sanatorios
14 plazas
19 librerias de libros
Ani rekyhyje
Ani rekyhyje
Ani rekyhyje
Ani rekyhyje
Ani rekyhyje
Ani rekyhyje
Prender fuego mi casa
Prender fuego mi cuarto
Prender fuego mi ropa
Prender fuego mi cama
Prender fuego un libro
Prender fuego mis libros
Prender fuego mis diarios
Prender fuego un celular, una computadora,
Prender fuego una tela,
Prender fuego un recuerdo
Prender fuego una pesadilla, o un sueño
Prender fuego un deseo,
Prender fuego un pasaje de tren,
Mi documento
Prender fuego la carta de un ex
Prender fuego el congreso, con lxs congresistas dentro
Prender fuego un cigarrillo,
Una pipa
Un habano,
Un porro,
Prender fuego una chimenea,
Prender fuego una bandera
LISTA DE COSAS PARA PRENDER FUEGOS
La General Paz, es como una arteria más del rio. La linea divisoria.